viernes, 10 de octubre de 2014

El Palomar




Este grupo se conforma por tres plazas con arreglo espacial jerarquizado, las que disminuyen su tamaño a medida que aumenta la altura de las plataformas hacia el sur donde remata con un basamento piramidal con dos construcciones laterales que, en conjunto constituyen un arreglo tríadico. Este arreglo conforma el punto principal de todo el conjunto. Cada plaza está delimitada en sus costados por edificios alargados de múltiples cuartos conocidos en la arqueología como “Tipo Palacio”. Las diferentes nivelaciones definen tres conjuntos que se originan en el patio hundido, el cuadrángulo del palomar y el conjunto tríadico que se encuentra en la parte más alta. La entrada principal al grupo se conforma por un montículo alargado y de baja altura ubicada al norte. El acceso a cada nivel se hace por medio de una escalinata volada, se trata de una media bóveda adosada a la fachada de un edificio

El acceso principal al grupo es por el norte, topando de frente con una estructura alargada con múltiples cuartos que separa la primera plaza de la central y que se conoce como la casa de las palomas o el palomar. La fachada de este edificio presenta nueve cresterías caladas de forma triangular escalinado que al asemejar palomares otorgaron su nombre tanto a la estructura como al grupo. Las cresterías desplantadas sobre una fila de pilares que estaba recubierta con relieves de estuco pintado y figuras de personajes sobre pedestales al centro


Este conjunto, al igual que la mayoría de la arquitectura visible hoy en día, fue construido entre el siglo III y X d.C. Su diseño arquitectónico semeja a las acrópolis localizadas en otros sitios como el de Piedras Negras en Guatemala, los cuales son conjuntos que asocian con grupos palociegos en los que se desarrollaron actividades administrativas, ceremoniales y, en muchas ocasiones habitacionales ya que también fueron la residencia de la familia real o de grupos de la nobleza.

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